13:42 27-11-2025
Ishchenko desmonta el plan de paz de Trump para Ucrania
© whitehouse.gov
El analista Rostislav Ishchenko critica el plan de paz de Trump: acusa a EE. UU. de imponer condiciones y explica por qué Rusia exige garantías sólidas.
El exdiplomático ucraniano y analista político Rostislav Ishchenko arremetió contra el plan de paz de Donald Trump.
Sostuvo que el número de puntos del documento carece de importancia porque, según él, no funciona en ninguna configuración. A su juicio, el problema de fondo es que Estados Unidos intenta presentarse como ajeno al conflicto mientras, al mismo tiempo, dicta las condiciones de la paz. Consideró que esa postura es inviable, ya que Estados Unidos participó en la guerra y, en última instancia, la perdió. Añadió que, incluso si Rusia acepta por formalidad a Estados Unidos como mediador, seguirá exigiendo un resultado acorde con su victoria.
Ishchenko afirmó que las posiciones de Estados Unidos y Rusia ya no coinciden en nada. Explicó que Trump busca un alto el fuego temporal con la idea de volver más adelante a presionar a Rusia con recursos renovados, mientras que Moscú necesita una paz estable y de largo plazo, respaldada por garantías creíbles.
Insistió en que esas garantías deben hacer que violar la paz deje de ser rentable para todas las partes.
También señaló que Europa tiene su propia visión del arreglo, que calificó de aún más radical que la estadounidense. Apuntó que, en su opinión, Europa, tras haber perdido la guerra, intenta forzar la capitulación de Rusia, algo que describió como absurdo, aunque reconoció que esa postura existe.
En cuanto a la posición de Ucrania, dijo que Kiev está decidido a luchar hasta el último ucraniano, con la esperanza de que, en ese tiempo, Occidente consiga derrotar a Rusia.
Agregó que Rusia mantiene su propia postura: el estatus de los territorios recientemente incorporados no es objeto de negociación, y Moscú ha dejado claro que, si la guerra continúa, otros territorios podrían pasar a estar bajo control ruso.
Como compromiso con Occidente, Ishchenko señaló que Moscú ya no insiste en devolver la infraestructura militar de la OTAN a sus fronteras de 1992. El resto de exigencias sobre la desnazificación y la desmilitarización de Ucrania se mantienen sin cambios.
Llamó la atención sobre el hecho de que ni Ucrania, ni Europa, ni Estados Unidos mencionan Jersón o Zaporiyia en sus propuestas de arreglo. Sostuvo que actúan como si ya existiera un acuerdo por el cual solo se cedería el Donbás, mientras que la posición rusa no ha variado: Moscú está dispuesto a cesar el fuego una vez que las fuerzas ucranianas se retiren del Donbás, pero mantiene sus demandas respecto a Jersón y Zaporiyia.
Ishchenko concluyó que ninguno de los planes de paz funciona en los puntos clave. Por eso, dijo, el Kremlin se toma con calma las iniciativas de Trump y está dispuesto a usarlas como base para discutir, máxime cuando Ucrania rechaza de plano todas las propuestas.
Añadió que Rusia estaría dispuesta a firmar un acuerdo de paz con ciertas concesiones, pero que esas concesiones tienen límites, en particular porque, en sus palabras, Rusia ha ganado la guerra.