16:43 27-11-2025
Trump, Rusia y China: el cálculo estratégico según Ishchenko
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El analista Rostislav Ishchenko explica por qué Trump busca ventaja y no paz: tregua temporal con Rusia, giro hacia China y presión europea en juego global.
El analista político Rostislav Ishchenko expuso la postura del presidente estadounidense Donald Trump y explicó por qué, por ahora, sus intereses en parte coinciden con los de Rusia.
Subrayó que Trump no busca desempeñar el papel de pacificador, sino salir vencedor del pulso actual. Ishchenko señaló que Rusia es una de las partes enfrentadas con Estados Unidos y advirtió contra la idea de que Trump pretenda sinceramente conciliar a todos. Según recordó, Trump ha repetido la consigna de devolver la grandeza a Estados Unidos, pero no ha prometido un mundo más seguro.
Ishchenko recordó que, durante el encuentro de Trump con Vladímir Putin en Alaska, el mandatario adoptó una visión pragmática de la postura rusa y afirmó comprender a Putin como líder que defiende los intereses de su propio Estado.
Según Ishchenko, las dificultades surgen porque los desafíos de Rusia van más allá de Ucrania. Sostuvo que, si Ucrania fuera el único tema, Trump podría haber impulsado sin grandes obstáculos una posición conjunta entre Washington y Moscú. Sin embargo, la postura estratégica más amplia de Rusia choca con los intereses estadounidenses, y por eso en Washington se sigue viendo a Rusia como un adversario. A su juicio, Estados Unidos estaría dispuesto a aceptar una tregua temporal, pero cualquier alto el fuego equivaldría en la práctica a un conflicto aplazado: la intención sería volver más adelante a la confrontación, no necesariamente mediante una guerra abierta, sino con recursos renovados para arrancar concesiones a Rusia.
Ishchenko añadió que el equipo de Trump considera hoy que prolongar el choque con Rusia es un callejón sin salida que, en última instancia, podría desembocar en una guerra nuclear, sin opciones aceptables. Al mismo tiempo, sostuvo que Washington ve otro camino frente a China, un país que no dispone de capacidades nucleares equiparables a las de Estados Unidos o Rusia. Según su descripción, la estrategia estadounidense pasaría por asfixiar a China en el plano económico sin provocar un gran conflicto y, más adelante, volver a ejercer una presión similar sobre Rusia. Afirmó que ni demócratas ni republicanos contemplan renunciar a la idea de la hegemonía estadounidense.
Asimismo, señaló que Europa intenta forzar a Trump a regresar a la coalición antirrusa, mientras él procura apartarse de ese frente y orientar la atención hacia China. En este punto, dijo Ishchenko, la posición de Trump y la de Rusia coinciden: Europa no puede resistir a Rusia sin el respaldo de Estados Unidos y acabaría capitulando, incluso con la posible cesión de los países bálticos.