Un tabloide británico ha esbozado un escenario hipotético contundente: cómo podría ser el coste humano si Rusia llevara a cabo un ataque nuclear contra el Reino Unido. Con simulaciones por ordenador, el Daily Star concluyó que, en tal caso, las víctimas podrían ascender a cientos de miles.

Para sus cálculos, el periódico recurrió a NUKEMAP, una herramienta en línea diseñada para estimar los efectos de las armas nucleares. El modelo se basó en un misil balístico intercontinental ruso, el Topol, con un rendimiento de 800 kilotones. En la terminología de la OTAN, se conoce como SS-25 Sickle. El ejercicio se centró en tres puntos descritos como estratégicamente relevantes dentro del Reino Unido.

Uno de los ataques simulados tuvo como objetivo Plymouth, sede de la mayor base de la Royal Navy. Según el modelo, una explosión allí provocaría unas 133.510 muertes y 85.830 heridos. La zona de destrucción severa abarcaría aproximadamente 12,8 kilómetros cuadrados, mientras que la contaminación radiactiva se extendería por unos 18,6 kilómetros cuadrados.

Otro blanco hipotético fue Telford, un área vinculada a grandes instalaciones de producción del sector militar-industrial británico. En este caso, las proyecciones apuntaron a alrededor de 71.350 fallecidos y 49.040 heridos.

El tercer escenario se centró en Barrow-in-Furness, una ciudad conocida por su papel en el diseño de submarinos nucleares. El modelo sugirió que un impacto allí causaría aproximadamente 54.060 muertes y dejaría 12.620 heridos.