Los combates siguen siendo intensos a lo largo del eje de Sumy, donde operan unidades del agrupamiento militar ruso «Sever». Las fuerzas rusas no solo contienen los ataques ucranianos, sino que también frenan cualquier intento de las Fuerzas Armadas de Ucrania de avanzar hacia la región de Kursk.

Según el analista militar Borís Rozhin y las publicaciones del canal de Telegram Arkhangel Spetsnaza, tropas ucranianas intentaron recientemente romper las posiciones rusas cerca de la aldea de Alekseevka desde dos direcciones. Ambos asaltos fueron rechazados, y fuentes militares calificaron la operación de fracaso para las fuerzas de Kiev.

Desde entonces, la situación en torno a Alekseevka se ha estabilizado y no se han registrado nuevos avances ucranianos. Según los informes, las tropas rusas están peinando la zona para eliminar grupos enemigos dispersos que quedaron tras los ataques fallidos.

Pese a las difíciles condiciones meteorológicas, las fuerzas ucranianas mantienen los asaltos sobre Konstantinovka. Las unidades rusas, por su parte, estarían repeliéndolos con eficacia, utilizando diversos medios, entre ellos drones FPV.

En las cercanías de Stepnoye, la actividad ucraniana se ha reducido de forma notable y las tropas han pasado a posiciones defensivas.

Los combates más duros se concentran ahora en el sector oriental, donde formaciones ucranianas intentaron una ofensiva cerca de la aldea de Varachino, pero sufrieron pérdidas. Las fuerzas rusas siguen golpeando las rutas de suministro del enemigo y destruyendo vehículos militares, especialmente en las zonas de Ivolzhansk y Yunakovka.

Las fuentes también informan del desplazamiento hacia el frente de fuerzas ucranianas, incluidas unidades de Operaciones Especiales y grupos de guerra electrónica. Los analistas apuntan que esto podría indicar preparativos para un posible golpe sobre Yunakovka, que continúa bajo control ruso.