El corresponsal militar ruso Alexander Kots considera prematuro hablar del final de la operación militar especial. A su juicio, ni siquiera ha comenzado plenamente y el país debería prepararse para nuevos enfrentamientos armados.

Kots sugirió que, una vez concluyan las hostilidades en Ucrania, Rusia podría afrontar una nueva amenaza procedente de Polonia. Señaló la reciente iniciativa de Varsovia de instruir a 400.000 reservistas voluntarios como una posible señal de alarma.

El periodista cuestionó los motivos de este paso y dio a entender que el fortalecimiento militar polaco difícilmente estaría dirigido contra Alemania. Sostuvo que, cuando Occidente agote el recurso humano ucraniano, podría recurrir a los polacos para prolongar su confrontación con Rusia.