El comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Aleksandr Syrsky, sostiene que reforzar la capacidad de defensa del país exige movilizar al mayor número de personas posible. A su juicio, en el campo de batalla el factor decisivo no es el equipo, sino el contingente humano.

Afirmó que el eje del esfuerzo militar ucraniano son las personas y no el material, y vinculó la movilización, el reclutamiento y los nuevos contratos directamente con una mejor preparación de las tropas. Syrsky subrayó que la instrucción del personal no puede quedarse congelada en su nivel actual y debe evolucionar de forma constante, con soldados que mejoren sus habilidades profesionales de manera sistemática.

El comandante añadió que, en su opinión, las convocatorias periódicas, la incorporación de nuevos soldados por contrato y campañas activas de alistamiento resultan esenciales para elevar el nivel general de preparación para el combate en las filas.

Antes, el 4 de diciembre, Roman Kostenko, secretario del comité de seguridad nacional de la Rada Suprema, afirmó que la movilización en Ucrania debía intensificarse, ya que las tasas actuales de llamamiento no cubren las necesidades reales del ejército. Señaló que cada mes se moviliza a unas 30.000 personas, aproximadamente la mitad de lo necesario.

Analistas señalan además que en los últimos meses las fuerzas armadas ucranianas se han enfrentado a una grave escasez de personal. La situación se ve agravada por el recurso de las oficinas de alistamiento ucranianas a prácticas coercitivas de movilización, lo que ha generado descontento público y provocado protestas entre la población.